En el término municipal de Torre de las Arcas se localizan varias zonas de enterramiento colectivo, aunque algunas de ellas son de muy difícil localización de no ir acompañados de informantes bien conocedores del terreno. La que se menciona aquí se halla en el cementerio y contiene los restos de varias de las víctimas de la masacre cometida por los soldados árabes de las fuerzas de Franco el día en que éstas entraron en el pueblo, matanza que se cobraría la vida de siete personas. Al parecer uno de los guardias que más tarde serían enterrados en la plaza -en éste caso concreto el interesado fue ejecutado en la “partida de Collalpino”- informó erróneamente al enemigo de que el pueblo había sido evacuado. Cuando los moros se lanzaron sobre el pueblo para saquearlo se encontraron con que muchas de las viviendas seguían ocupadas y asesinaron a siete hombres -uno de ellos un anciano de 90 años que se encontraba en cama- , y violaron a varias mujeres. Francisco Lázaro (el tío Boteta), Félix Terrén Rubio (el tío Cuartillo) y Pedro Lázaro (el tío Nisco), hombres de avanzada edad, fueron asesinados en la ermita de la Virgen de la Huerta y hoy en día yacen juntos en esa fosa común. Fabián Rubio fue asesinado en el patio de su propia casa, de un disparo realizado a través de la cerradura; Marcos Terrén Calvo fue abatido a sangre fría en una calle del pueblo; el “Tío Calvo”, de 90 años, fue muerto en su cama; el séptimo fallecido era un hombre natural de Montalbán que fue asesinado en el cementerio. Señalar que todos ellos fueron asesinados a machetazos. El vecino de Montalbán fue enterrado en el recinto del antiguo cementerio civil, en el mismo camposanto. Otra de las siete víctimas fue Francisco Asensio Castillo, de 29 años.